Una joven startup se encontraba en una fase de ventas y ingresos estancados cuando decidió buscar una expansión. Para encaminar a la empresa, se llevó a cabo una consultoría integral.
Primero, se realizaron talleres bien organizados con todo el equipo para evaluar la situación actual de la empresa e identificar los desafíos y obstáculos presentes. Juntos, analizamos dónde se encontraban las mayores oportunidades para aumentar las ventas y evaluamos qué acciones serían fáciles o complejas de implementar. Con esta base, se elaboró un plan de acción detallado.
La primera medida fue la revisión de la imagen externa, incluyendo la página web y las presentaciones de la empresa. Se mejoraron los documentos de ventas, destacando los aspectos únicos y los beneficios para los clientes, y se optimizó el diseño para transmitir una impresión profesional. Al mismo tiempo, el equipo fue fortalecido mediante capacitaciones y entrenamientos específicos para mejorar sus habilidades en ventas y reducir cualquier miedo o inseguridad.
En estrecha colaboración con el equipo, se desarrolló una estrategia de ventas clara, se evaluaron las acciones y se establecieron prioridades siguiendo el principio SMART, asignando responsabilidades claras.
La implementación se realizó de manera gradual, monitoreando y ajustando continuamente el progreso según fuera necesario. Gracias a estas medidas, no solo aumentaron las ventas, sino que también se lograron los primeros grandes contratos.
Primero, se realizaron talleres bien organizados con todo el equipo para evaluar la situación actual de la empresa e identificar los desafíos y obstáculos presentes. Juntos, analizamos dónde se encontraban las mayores oportunidades para aumentar las ventas y evaluamos qué acciones serían fáciles o complejas de implementar. Con esta base, se elaboró un plan de acción detallado.
La primera medida fue la revisión de la imagen externa, incluyendo la página web y las presentaciones de la empresa. Se mejoraron los documentos de ventas, destacando los aspectos únicos y los beneficios para los clientes, y se optimizó el diseño para transmitir una impresión profesional. Al mismo tiempo, el equipo fue fortalecido mediante capacitaciones y entrenamientos específicos para mejorar sus habilidades en ventas y reducir cualquier miedo o inseguridad.
En estrecha colaboración con el equipo, se desarrolló una estrategia de ventas clara, se evaluaron las acciones y se establecieron prioridades siguiendo el principio SMART, asignando responsabilidades claras.
La implementación se realizó de manera gradual, monitoreando y ajustando continuamente el progreso según fuera necesario. Gracias a estas medidas, no solo aumentaron las ventas, sino que también se lograron los primeros grandes contratos.